Una tarde de lo más tranquila

Como bien dice el título de la entrada, la tarde de hoy ha sido muy tranquila.
Después de reposar la comida y viendo que estaba apunto de caer en el embrujo del sofá, me he vestido y he preparado los "bártulos" para ir a echar unas varadas.
Cuando he llegado al lugar elegido la mar estaba un poco tomada y el golpe era perfecto. Las sensaciones han sido muy buenas pero ellas no han querido dar la cara, algo rutinario ya...
En la zona del Cantábrico que suelo pescar (Euskal Herria y Cantabria),el bajón de pescado es increíble. Hay muy poco pescado y el que hay, con sonda y red de cerco, desaparece en unas pocas "largadas". Es una autentica vergüenza lo poco que se cuida aquí el medio marino, y qué decir de la falta de vigilancia  tanto en la mar como en nuestros ríos. En fin, que de donde no hay no se puede sacar.
Me gustaría ver (sin ánimo de ofender) como los pescadores de comunidades vecinas  con una cantidad de pesca increíblemente superior, iban a promocionar sus marcas y señuelos. Yo he viajado a pescar a esas comunidades, preciosas y con muy buenas gentes, y casi tirase lo que tirase alguna "rascaba". Porque donde hay se pescan hasta con una mazorca de maíz, como se hacía aquí en tiempos venideros.
Pues nada señores/as a seguir yendo al pedrero que el día menos pensado alguna gran lubina que halla conseguido pasar todas las pruebas del "Gran Prix", tropezará con nuestros señuelos.